El Índice de Riesgo Climático de Germanwatch, publicado recientemente, calcula que han muerto 800.000 personas y se han gastado 4,2 billones de dólares en todo el mundo debido al aumento del número y la intensidad de los fenómenos meteorológicos extremos en los últimos 30 años.
El estudio, elaborado por la organización ecologista alemana Germanwatch, muestra que las inundaciones, sequías, tormentas y olas de calor han afectado especialmente a los países del Sur Global.
La clasificación se basa en los efectos económicos y humanos, como víctimas mortales, personas afectadas, heridos y personas sin hogar, resultantes de los más de 9.400 desastres climáticos registrados entre 1993 y 2022.
En el Sur Global, países como China, India y Filipinas se encuentran entre los más afectados por fenómenos meteorológicos recurrentes, mientras que naciones insulares como Dominica, Honduras, Myanmar y Vanuatu han sido las más afectadas por fenómenos extremos.
El Norte también está sintiendo los efectos del calentamiento provocado por los combustibles fósiles: tres países de la Unión Europea –Italia, España y Grecia– figuran entre los diez más afectados.
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Una «nueva normalidad»
El informe enumera los incendios en la Amazonia y las inundaciones en Rio Grande do Sul como ejemplos de cómo el aumento de la temperatura media de la Tierra, que en 2024 superó la marca de 1,5°C, nos está llevando a una «nueva normalidad».
«En la Amazonia, los peores incendios forestales desde 2005 han destruido 22 millones de hectáreas, una superficie casi del tamaño del Reino Unido. Las lluvias torrenciales y las inundaciones en Brasil, que acogerá la COP30, han desplazado a más de 580.000 personas y causado innumerables muertes», señala.
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Solo en el caso de Rio Grande do Sul, las inundaciones de mayo causaron pérdidas económicas estimadas en 5.050 millones de dólares.
También fue considerado el episodio más costoso de la historia de Brasil en términos de pérdidas aseguradas, con 1.400 millones de dólares, con daños generalizados en infraestructuras, propiedades y servicios esenciales.
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Urgen medidas
El informe sugiere que a los países de ingresos y emisiones elevados les interesa intensificar las medidas de mitigación, incluida la presentación de nuevas contribuciones determinadas a nivel nacional que se ajusten al objetivo de mantener el calentamiento global por debajo de 1,5 ºC.
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«Si los datos de estos países fueran tan completos como los de muchos países del Norte Global, podría hacerse visible un grado aún mayor de efectos económicos y humanos», explicó David Eckstein, asesor principal de financiación e inversiones climáticas de Germanwatch y coautor del informe.
«Cada vez hay más indicios de que estamos entrando en una fase crítica e impredecible de la crisis climática, que agravará aún más los conflictos, desestabilizará las sociedades y afectará negativamente a la seguridad humana en todo el mundo», agregó.
La organización también subraya que la COP29 fracasó a la hora de establecer un nuevo y ambicioso objetivo de financiación climática que no tenía en cuenta las necesidades identificadas y la urgencia de los retos climáticos en los países en desarrollo.
El fondo climático de 300.000 millones de dólares que se pagará anualmente hasta 2035, afirma, solo puede considerarse como la respuesta mínima a la creciente crisis climática.